Herbicidas
Los herbicidas suponen riesgos conocidos para la salud, como el riesgo a largo plazo de desarrollar cáncer o problemas de fertilidad.
Fuentes de exposición
Los ácidos fenoxiacéticos están clasificados como herbicidas. Se utilizaron por primera vez en la década de 1940, y se emplean en la agricultura desde mediados de la década de 1950. Se utilizan ampliamente en la silvicultura y, en cierta medida, en los jardines domésticos y representan alrededor del 70% de los weedicidas utilizados. Por lo tanto, estos herbicidas son de interés para el control de las aguas superficiales y subterráneas. El agua potable también se controla en este sentido.
Debido a su alta solubilidad en el agua y su baja sorción en el suelo, los fenoxiácidos se caracterizan por su alta movilidad en el suelo. Por lo tanto, pueden penetrar fácilmente en las aguas subterráneas y superficiales.
Su contenido en el agua varía. Depende, entre otras cosas, de la fuente de contaminación y de su distancia al agua y al suelo, de los factores climáticos y geológicos, del tipo de herbicida y de la frecuencia de aplicación.
La concentración de ácido fenoxídico en las aguas subterráneas es mucho menor que en las aguas superficiales. Ambos son fuentes de agua potable. Los fenoxiácidos son compuestos de actividad endocrina que entran en el cuerpo humano a través del tracto gastrointestinal. El agua potable que contiene fenoxiácidos supone un riesgo importante para la salud.
Posibles efectos sobre la salud
Los herbicidas pueden tener una serie de efectos negativos para la salud y el medio ambiente si no se utilizan correctamente. La precaución es necesaria para reducir el riesgo de enfermedad a largo plazo. Estas son las consecuencias más comunes:
- Cáncer o
- problemas de fertilidad.
Fuente:
https://www.waters.com/nextgen/ch/de/library/application-notes/2013/direct-quantification-acidic-herbicides-drinking-water-samples-ultra-sensitive-uplc-ms-ms-analysis.html
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC6994553/